Primera, Verdadera y Única Iglesia

Lo primero y lo más importante que debemos considerar es el origen Divino y Santo de nuestra Iglesia, así como su fundamento principalmente cristiano, pues fue Cristo mismo Quien fundo la Iglesia.

17 Jesús le contesto: «Feliz tu, Simón, hijo de Jonás, porque ningun mortal te ha revelado esto, sino mi Padre que está en los cielos. 18 Y yo te digo: «Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y el poder del abismo no la vencera. 19 Yo te daré las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo».

Mateo 16 , 17-19

El evangelio, a través de la cita bíblica anteriormente enunciada, nos provee la iluminación perfecta para entender en primer lugar, que Jesucristo establece su autoridad y propiedad sobre la santa iglesia. «sobre esta piedra edificaré mi iglesia». Esa autoridad y propiedad sobre la iglesia, hace posible que Jesucristo tenga el poder soberano y suficiente sobre la misma, y en su infinita sabiduría, designa a Pedro como el primer pastor, guía, protector y primer autoridad terrenal sobre la santa iglesia para cuando ocurriera la gloriosa ascensión de Nuestro Señor Jesucristo al cielo. Legitimando de esta manera no solo el primado de Pedro, sino también la autoridad de sus sucesores hasta el día de hoy, siendo así tan vigente como hace 2000 años, la autoridad del Papa sobre la Iglesia en la tierra. Adicional a lo anterior, del breve fragmento del evangelio enunciado aquí, también queda muy claro que se trata de una Única Iglesia, pues El ha dicho “Mi Iglesia”, no “Mis Iglesias”, tema que profundizaremos más adelante a partir de la lectura del libro del apocalipsis.

Fue gracias a este primer designio divino y a la aceptación por parte de Pedro de la obra que se le estaba encomendando, que nació la santa iglesia y de esos primeros trabajos con la pequeña comunidad naciente de la iglesia, los apóstoles.

Ser católico es ser cristiano

Como católicos, siempre tendemos a caer en el error de responder con la negación cuando se nos pregunta si somos cristianos. Esto debido fundamentalmente a que la nubla existente en el mundo de hoy, ha dado pie a que se asigne el titulo de cristiano, a aquellas personas que pertenecen o frecuentan reuniones de sectas protestantes, es decir a aquellos que pertenecen a sectas derivadas del cisma generado por Martin Lutero, con la mal llamada reforma protestante. Adicional a lo anterior también están de por medio nuestras débiles bases y nuestro propio desinterés por la catequesis y la formación espiritual, haciendo que ante la pregunta de si somos cristianos, nos llenemos de motivos y con una seguridad suprema respondamos: “No. Yo soy católico”.

Y si, efectivamente suena muy lindo y nos llena de orgullo decir que somos católicos, pero no podemos desconocer el hecho de que somos cristianos, por tanto, la respuesta un poco más apropiada es “Si, soy Cristiano Católico”. Y si desean pueden agregar lo de apostólico y romano, pero puede llegar a ser demasiada información para luego tener que sustentar y explicar a partir de una pregunta sencilla.

De manera breve procedo a ampliar el concepto, indicando que la iglesia es cristiana, por cuanto fue creada y pertenece a Jesucristo, y porque la difusión del evangelio y la obra salvífica de la iglesia se fundamenta en el conocimiento y seguimiento de cristo, en la búsqueda del reencuentro perfecto con el redentor. La palabra católica, hace referencia al carácter Universal de la Iglesia. Como ejemplo, la iglesia hace ver su universalidad a través de la santa misa, pues en cualquier lugar del mundo la misa es exactamente la misma en cuanto al rito y las lecturas, la única diferencia es el idioma y la homilía del sacerdote, pues en cada sacerdote se puede dar una iluminación diferente acerca del evangelio a través del espíritu santo. Así como en nosotros, se puede dar otra iluminación a partir del evangelio.